15 de septiembre de 2023
¿Sabías que mantener una actitud positiva en el trabajo aumenta la productividad en un 12%?
Consigue de una vez por todas mantenerte positivo de lunes a viernes con las siguientes técnicas de motivación.
Tener molestias en la espalda o en las cervicales es muy corriente en personas que pasan largas jornadas sentadas. Generalmente, este problema lo tiene los oficinistas y todos aquellos que trabajamos frente a un ordenador, volviéndose un poco complicado paliar estos dolores, ya que, la rutina de trabajo debe continuar. Por suerte, existen algunos ejercicios, como los estiramientos en la oficina, que puedes hacer fácilmente. Si quieres saber cuáles son, ¡sigue leyendo!
Como sabes, es mejor prevenir que curar, y con la lista de estiramientos y ejercicios para realizar en la oficina que te damos a continuación, es precisamente lo que harás. No obstante, si sufres de severos problemas de espalda o cervicales, lo mejor es que acudas a un especialista.
¡No pierdas detalle de la siguiente lista de ejercicios para hacer en la oficina!
Estiramiento de cuello lateral:
Estiramiento de brazos y espalda:
Los dolores de espalda vienen dados por varios motivos, y casi siempre, el origen es la suma de varios de ellos. Por lo general, estas son las causas a las que todos, en algún momento de nuestra vida, nos enfrentamos:
El sedentarismo: según estudios elaborados por el INE sobre sedentarismo y salud en España, más del 50% de los españoles llevamos vidas sedentarias, unas veces por el trabajo que tenemos y otras, por cómo invertimos nuestro tiempo libre: si lo pasamos sentados, si tenemos hobbies más o menos activos, si reservamos tiempo cada día para hacer ejercicio… cuando nos acostumbramos a ser sedentarios, nuestros músculos se atrofian, nuestros huesos no reciben ningún estímulo por el cual fortalecerse y la amenaza de las enfermedades cardiorrespiratorias aparecen.
Distensión muscular y de los ligamentos: se dan cuando hacemos ejercicios repetitivos o mantenemos malas posturas durante mucho tiempo. Lo que ocurre es que las estructuras se inflaman y presionan a los nervios, lo que produce ese dolor punzante.
Achaques de la edad: conforme vamos envejeciendo, las estructuras articulares se van desgastando, lo que se conoce como artritis. Los cartílagos, que hacen de almohadilla entre las intersecciones que forman las articulaciones, se desgastan y las dejan sin amortiguación.
Sobrepeso: exceder en peso, desde un punto de vista médico, que no estético, ya que este es muy subjetivo, el sobrepeso debilita los músculos, lo que puede ocasionar hernias y protrusiones.
Mala nutrición, tabaquismo y alcoholismo: fumar y beber en exceso, así como llevar una dieta poco saludable, alta en grasas, azúcares y sales, puede provocar una disminución en la circulación de la sangre e inflamación del disco que terminará comprimiendo el nervio.
Los trastornos musculoesqueléticos son las afecciones más comunes por causas laborales. Sobre todo, afectan a las extremidades superiores, cuello y espalda; y los que mencionamos a continuación son los más comunes:
Tendinitis del manguito de los rotadores: es la inflamación de los tendones de los músculos de hombro, especialmente del manguito de los rotadores, y suele originarse por la sobrecarga de los tendones y por movimientos repetitivos.
Epicondilitis: también llamado “codo de tenista”. Se desencadena por el esfuerzo repetitivo en el movimiento y por el que se inflaman los tendones de los músculos de la cara externa del codo.
Síndrome del túnel carpiano: es la compresión del nervio mediano a su paso por la muñeca a nivel del interior del túnel del carpo.
Lumbalgia: es una contractura dolorosa y persistente que se forma en la parte baja de la espalda a causa de sobrecargarla o mantener posturas repetidas durante mucho tiempo. Para evitarla hay que pensar constantemente en mantener la columna alineada con la pelvis y erguida.
Síndrome cervical por tensión: es otra de las contracturas musculares que se dan en el trabajo. Esta aparece en la región cervical posterior y está causada por una sobrecarga de trabajo, el uso repetitivo de los músculos o por posturas forzadas de cuello. Además, es especialmente frecuente en trabajadores que mantienen esta postura estática.
¿Quieres saber más sobre salud postural y tips sobre PRL? ¡No te vayas muy lejos de nuestro contenido porque seguiremos hablando de salud en el trabajo! Te esperamos en Educa.Pro.